Mesas del bar

-llego al bar y me siento en una mesa con el portatil-
camarero me trae una coca cola gracias!

*lee envio un mensaje a carlota*
ola carlota que tal la vigilancia en el bar todo bien??

-me suena el movil, y contesto a amaia-
si de momento nada raro, tu?

*escribo a carlota*
ok te aviso con cualkier cosa ten cuidado

-ENTRA UN GRUPO BASTANTE RARO DE SEÑORES-

.-los hombres empiezan a discutir con la dueña del bar-

- uno de ellos apunta a la dueña con una pistola. me levanto y le señalo yo con ella-
altoo baje en arma!

-intento cgr el mvl mntras le señalo cn la pistola, pero me golpea qedandome incosciente en el suelo, mntras se llevan a los dueños de el bar en una furgoneta negra-

- me qedo incosciente sin poder avisar a nadie-

*llamo a carlota no me lo coge voy para el bar

llego al bar y me encuentrop a carlota incosciente*
carlotadespietaa que a pasado

-abro los ojos poco a poco- donde estoy¿

carlota que a pasado ??soy amaia *asustada*

-mirando a todos los lados- no lo recuerdo muy bien...

haber cuentame lo que recuerdes *ayudandole a levantarse y sentandola en una silla*

estaba con el ordenador cuando empece a oir voces.. -pensando-

tranquila continua

gire la cabeza hacia las voces, y vi a unos hombres gritndo a la dueña del bar, y cuando volvi a mirar la estaban a puntando con una pistola.
me levante y le apunte yo, dcndole qe la bajara,
.
fui a avisaros con el movil, y me dio una bofetada dejandome incosciente...

le enviare un mensaje a saritaa
*escribiendo*

me duele muchisimo la cabeza.. vamos tras ellos, nose qe tramaran, tenias una furgoneta negra de matricula 1008 AF

tranquila vamonos para el hospital sabemos la furgoneta despues vamos a comisaria(te espero en la habitacion de aitor)

*mendao un sms a amaia*
-pero estais bien!?? que ha pasado??

*me suena el movil*
si amaia estamos bien vamos para alla y te explicamos

*entro en el bar*
disimulo como si fuera otro mas para que no se den cuenta que soy de los malos,
porque me avian mandado a matar a carlota fernandez porque sabia demasiado